Los cosplayers no se disfrazan, sino que se transforman realmente en el personaje que representan
Para un fan del manga practicar el cosplay supone más que llevar un simple disfraz de carnaval. Además de caracterizarse físicamente como los personajes, también piensan y actúan como si fueran uno de ellos.
Muchos de los practicantes de cosplay se meten tanto en la piel del personaje, que hacen de la ficción su propia realidad, y les supone una forma de evadirse.
No se sabe exactamente qué es lo que da el empujón para adentrarse en este mundo pero supone que ver a gente que “humaniza” a los personajes favoritos y se disfruta tanto, que nos lleva a querer probar esta experiencia.
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